«Si tienes miedo, significa que debes hacerlo»: lecciones de valentía de Sydney Sweeney

Sydney Sweeney es una de las actrices más brillantes y talentosas del Hollywood actual, cuyo nombre ya ha trascendido la pantalla y se ha convertido en un símbolo de valentía, ambición y crecimiento constante.

Sydney Sweeney es una de las actrices más brillantes y talentosas del Hollywood actual, cuyo nombre ya ha trascendido la pantalla y se ha convertido en un símbolo de valentía, ambición y crecimiento constante. Tras el impresionante éxito en la serie Euphoria y sus memorables papeles en The White Lotus y la película Te amo odiándote, no tiene intención de detenerse. En una entrevista exclusiva para W Magazine, Sydney habló abiertamente sobre sus miedos, riesgos y cómo el miedo se ha convertido en su principal motor.

«Si algo te da miedo, significa que vas por el camino correcto», dice la actriz. Ese es el lema que le ayuda a aceptar los papeles más difíciles y complejos, que requieren entrega total y profundidad emocional. No es sorprendente que este enfoque le haya valido una nominación al Emmy y el estatus de una de las jóvenes actrices más solicitadas.

Sydney no elige proyectos «seguros». Al contrario, interpreta como un desafío y una oportunidad para mejorar aquellos papeles que despiertan en ella resistencia interior y miedo. Esta regla se ha convertido en un filtro para sus elecciones y en una guía para su crecimiento profesional y personal.

El papel de Cassie en Euphoria fue un verdadero salto que abrió las puertas de Hollywood para Sydney. Pero después buscó conscientemente nuevos géneros y personajes. En el thriller Valle del Eco interpretó a una heroína que camina en la línea entre carisma y amenaza interna, y en el drama Edén, ambientado en las Islas Galápagos, la actriz dio vida a una persona que lucha por sobrevivir.

Especialmente impresionante fue su transformación para la película biográfica sobre la boxeadora Christy Martin. Para meterse en el papel, Sydney ganó más de 13 kilos y entrenó a diario, cambiando su cuerpo y estilo de vida. «Nunca me había sentido tan fuerte», admite la actriz.

Ese profesionalismo y disposición al cambio han convertido a Sydney en la favorita de los directores y le han permitido construir su carrera en sus propios términos.

Pero Sydney no es solo una cara en la pantalla. También trabaja activamente como productora, lanza sus propios proyectos y colabora con marcas globales —desde Kérastase hasta Miu Miu. Sus inversiones en bienes raíces y la planificación cuidadosa del futuro completan su perfil como mujer de negocios.

«Siempre tengo un plan: primero a cinco años, ahora a diez. Para mí es importante controlar el proceso y crear mis propias oportunidades», dice ella.