Según personas cercanas, ahora solo quiere criar a su hija en paz, sin el drama de los años anteriores.
Megan Fox intenta mantener el optimismo y una relación de coparentalidad saludable con su ex prometido, el músico Machine Gun Kelly, tras el nacimiento de su hija el 27 de marzo.
A pesar de que Kelly fue visto recientemente coqueteando con la actriz Sydney Sweeney en Las Vegas, Megan, de 38 años, todavía espera que él priorice a la familia. Las fuentes dicen que la actriz “desesperadamente quiere que él se haga cargo como padre”, ya que en su momento estaba emocionada de convertirse en madre junto a él.
Al día siguiente del incidente con Sydney Sweeney, la pareja fue vista junta nuevamente, tratando de pasar desapercibida mientras hacía compras en California. Megan se sentó en el asiento trasero junto a su recién nacida mientras Kelly hacía las compras.
Fox también cría a tres hijos — Noah, Bodhi y Journey — de su ex esposo Brian Austin Green. Kelly tiene una hija de 15 años, Casie, de una relación anterior.
Megan y Kelly comenzaron a salir en 2020, y dos años después él le propuso matrimonio con un anillo con forma de espina, “para que el dolor le recordara el amor”. Sin embargo, el compromiso terminó ese otoño debido a sospechas de infidelidad.
En marzo, Megan dio a luz a su hija, y Kelly anunció con orgullo en redes sociales: “¡Finalmente está aquí — nuestra pequeña semilla celestial!”. La feliz noticia llegó después de que Megan sufriera un aborto espontáneo en 2023.
A pesar de compartir un hijo, la actriz no tiene intención de reavivar su romance pasado. Según personas cercanas, ahora solo quiere criar a su hija en paz, sin el drama de los años anteriores.

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