Kate Moss vuelve a estar en el centro de atención — y no solo como supermodelo, sino como un ícono que sabe hablar con la moda en el lenguaje de las generaciones.
Kate Moss vuelve a estar en el centro de atención — y no solo como supermodelo, sino como un ícono que sabe hablar con la moda en el lenguaje de las generaciones. En la nueva campaña de la marca Self-Portrait, titulada simbólicamente Portraits Of Kate, ella no solo posa. Nos hace redescubrir esa estética de principios de los 2000, cuando el estilo callejero era audaz, las revistas en papel un accesorio imprescindible en el bolso, y las celebridades parecían auténticas y cercanas.
La sesión se realizó en lugares donde vive la verdadera moda urbana — junto a un quiosco de periódicos y frente a la puerta de una tienda común. El director es Johnny Dufort, mientras que el estilo fue supervisado por la propia Kate. Ella viste shorts de vinilo color borgoña, un top de punto negro y esos accesorios que nos transportan instantáneamente a la edad de oro del estilo urbano chic. En una de las fotos, Moss compra snacks y bebidas — y entre sus manos cuidadas aparece una revista impresa. Sí, Kate todavía lee papel. Con este simple gesto, nos recuerda que el glamour es mucho más que unas páginas: es un estado de ánimo.
Esta campaña no es solo un anuncio. Es una película muda donde cada imagen está impregnada de nostalgia por una época en la que el estilo era sincero, las fotos algo granuladas, y estar a la moda significaba ser uno mismo. Aquí no hay falsedad. Solo la ciudad, el sol, Kate y una ligera ironía. Y también un recordatorio: no temas ser sencilla. En tu día a día reside una fuerza increíble.
Self-Portrait interpreta con maestría el deseo de la mujer contemporánea: parecer natural, pero impactante. Por eso en la campaña también aparece Kate con una camisa kaki y leggings negros. Un look no para la pasarela, sino para la vida — cómodo, claro y sobre todo seguro. Justo como nos gustaría sentirnos cada mañana: sin esfuerzos exagerados, pero con un estilo interior que no se puede ocultar.
Todo esto vuelve a hacer de Kate Moss más que una modelo. Ella es el símbolo de un tiempo que regresa. Y mientras Pinterest sigue guardando sus fotos de archivo, Self-Portrait crea nuevas imágenes igual de icónicas. Porque una verdadera ícono nunca envejece. Solo cambia de escenario.
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