Kylie Jenner y los 10 años de Kylie Cosmetics: cómo un sueño adolescente se convirtió en un imperio de la belleza

Hace diez años, tres modestos kits de labiales mates con perfilador cambiaron las reglas del juego en la industria beauty. En aquel entonces, Kylie Jenner, con apenas 18 años, se arriesgó al lanzar los Kylie Lip Kits — y desató un fenómeno mundial.

Hace diez años, tres modestos kits de labiales mates con perfilador cambiaron las reglas del juego en la industria beauty. En aquel entonces, Kylie Jenner, con apenas 18 años, se arriesgó al lanzar los Kylie Lip Kits — y desató un fenómeno mundial. Segundos bastaron para que todo se agotara. Hoy, celebrando el décimo aniversario de Kylie Cosmetics, Kylie aparece en la portada de WWD Beauty Inc. ya no como una joven influencer, sino como la dueña de una marca valorada en miles de millones.

5000 kits a 29 dólares. Dolce K, Candy K y True Brown K. Internet estalla, y el mundo de la belleza entiende: ha comenzado una nueva era — la era en la que las redes sociales marcan las tendencias, y Kylie se convierte en una figura icónica del marketing digital.
Un año después, el catálogo de la marca se amplía con sombras, iluminadores, brochas y accesorios. Para el verano, la empresa registra 420 millones de dólares en ventas — y eso es solo el principio.

2019 marca un punto de inflexión. El gigante Coty Inc. adquiere el 51 % de Kylie Cosmetics por 600 millones de dólares, valorando la empresa en 1,2 mil millones. Es la primera vez que un gigante tradicional de la cosmética cree en la fuerza de una marca creada por una influencer.

Desde entonces, Kylie Cosmetics deja de ser simplemente “la marca de una bloguera” y pasa a convertirse en un jugador de talla mundial.

Kylie no se detiene en el maquillaje. La línea se enriquece con productos de cuidado de la piel y, en 2024, con su primer perfume — Cosmic by Kylie Jenner — que se convierte de inmediato en un éxito.

En 2025, Jenner desfila en el show de Coperni en París, una aparición que genera 17 millones de dólares de impacto mediático para la marca. Su proyecto paralelo — la firma de moda Khy — también crece con paso firme.

En diez años, Kylie ha pasado de ser una adolescente que experimentaba con labiales a una mujer para la que la belleza es un lenguaje, una forma de comunicación y de autoexpresión.

«He comprendido que Kylie Cosmetics no son solo productos. Es confianza, es un vínculo con las personas que comparten mi visión», confiesa Jenner.